Christian Bragarnik intentó sin éxito convencer al Gremio de Porto Alegre para hacerse con los servicios del centrocampista Lucas Silva en el pasado mercado de invierno.
Fichado por el Real Madrid en enero de 2015, el centrocampista nunca llegó a abrirse hueco en el equipo, por lo que tras apenas acumular nueve partidos y superar cesiones en Olympique de Marsella y Cruzeiro, optó por desvincularse definitivamente de la entidad. Ahora, el canarinho vuelve a sonreír en Porto Alegre.
El club no veía mal la opción de traspasar al jugador que se nego en redondo a hacer efectiva la operación.
