El Elche regresa a la actividad tres días después de la victoria ante el Mallorca. Casi sin tiempo para asimilar lo sucedido en un Martínez Valero abarrotado, la plantilla franjiverde entra en dinámica de partido para afrontar la jornada 33 de Liga, en la que viajarán al Benito Villamarín para enfrentarse a un Betis que se juega media temporada en una semana. Y es que el conjunto verdiblanco, que ha centrado gran parte de sus esfuerzos en clasificar a Champions para la temporada que viene, disputará este fin de semana la esperada final de Copa de Rey frente al Valencia. A pesar de esta situación, Francisco niega que el Betis tenga la mirada puesta en ese encuentro: “No contemplo la final de Copa para nada. Quizá sea el partido más importante para ellos en muchos años, pero están a 3 puntos de Champions. Creo que van a jugar los mejores, y nosotros lo hemos preparado así. No espero ninguna debilidad”.
Consciente de la profundidad de plantilla y de la calidad individual de los hombres de Manuel Pellegrini, el técnico del Elche ha querido destacar la dificultad de extraer un resultado favorable del Benito Villamarín: “Es un partido muy complicado. Tienen una plantilla versátil muy compensada en todas las posiciones: mucho dinamismo en la zona media, con Canales, Fekir o Guardado; y verticalidad en los hombres de arriba, con Tello, Joaquín, Willian José o Borja Iglesias. Sería un error pensar que solo nos pueden hacer daño a través de centros laterales. Es una de las mejores plantillas de la Liga”. Sin embargo, el almeriense asegura haber trabajado para contrarrestar las virtudes del Betis: “Nos van a dominar por momentos, pero vamos a utilizar nuestras armas para vencer y vamos a poner a los mejores para ganar. Ahora es cuando tenemos que ser ambiciosos”.
La victoria frente al Mallorca alejó al Elche de un descenso que mira desde lejos: hasta 7 puntos -y cuatro equipos- separan al club franjiverde de la zona roja de la tabla. Sin embargo, los triunfos de Alavés y Levante y la competitividad de los equipos de abajo ajustan la clasificación y asustan a Francisco, que desconoce el número de puntos necesarios para salvarse y no quiere que sus hombres se relajen: “Tenemos que generar presión porque de ganar ante el Betis daríamos un paso de gigantes. Me costaba dormir pensando en el partido de mañana, nos estamos jugando muchísimo y no hay tiempo para relajaciones. No podemos perder un solo minuto, quien se relaje ya sabe que no puede competir en este equipo”.
Con un calendario tan comprimido, Francisco ha asegurado que rotará algunas piezas en su alineación: “Hemos dado más tiempo de recuperación y hemos enfocado la preparación del partido a nivel analítico. Si hay que hacer cambios no me preocupa. Alguna rotación habrá, es imposible repetir once con tan poca diferencia entre un partido y otro. Esté quien esté, va a competir al máximo”. Sin los lesionados Boyé y Carrillo, de quienes ha confirmado sus “buenas sensaciones” y la posibilidad de que estén disponibles en el próximo encuentro ante Osasuna, el técnico franjiverde tendrá que volver a adaptar el planteamiento de partido, aunque deja en el aire si mantendrá una línea de 3 centrales o regresará al convencional 4-4-2: “No voy a morir con mis ideas nunca. Cambio dependiendo del rival y de nuestros jugadores. Lo que teníamos el sábado se adaptaba para jugar con línea de 3 y quedé contento con ella. Juguemos con línea de 3 o de 4, mi equipo va a ser ofensivo. Nunca vamos a salir con carriles para defender”.
El almeriense también ha querido agradecer el trabajo de Javi Pastore, uno de los hombres que menos protagonismo ha tenido en sus alineaciones desde que llegó al banquillo del Elche: “Pastore entrenó dos sesiones la semana pasada sabiendo que nos faltaban efectivos y puso de su parte para estar en la convocatoria. Nos está ayudando muchísimo en el vestuario y le estoy muy agradecido, porque hay muy pocas personas con su veteranía y buen hacer en un equipo”. Quién sabe si mañana, con las rotaciones que planteará Francisco, llegará la oportunidad para ‘el Flaco’.