Mazazo para el Elche contra el Real Valladolid que puede costar caro en su lucha por la salvación en Primera. Dejó escapar la victoria ante un rival directo, que igualó 1-1 en una acción a balón parado en el minuto 85. Los franjiverdes, que se adelantaron con un gol de Fidel en el 22′, cuajaron un buen partido, pero fiaron el triunfo a aguantar atrás y lo pagaron. Olaza igualó tras una peinada de Rigoni, quien falló un mano a mano instantes antes. La igualada le mantiene en descenso a seis jornadas del final.

Fran Escribá resolvió la incógnita de la portería con continuidad: Gazzaniga jugó por segundo partido consecutivo. Formó parte de un once con cinco novedades. Casi todos en las bandas. En la derecha, Barragán y Tete Morente entraron por Helibelton Palacios y Josan. Y en la izquierda, Josema y Fidel, de vuelta tras sanción, por Mojica y Rigoni. En el eje de la defensa, Gonzalo Verdú regresó por Diego González.

Tras un inicio de tanteo, el Elche encontró más continuidad en el juego. A partir del balón, tuvo más presencia en campo rival y generó alguna ocasión. La más clara, un disparo de Pere Milla en el área que obligó al portero Masip a estirarse. Instantes después, Fidel probó con un tiro escorado que atrapó el guardameta.

En el ecuador del primer tiempo, ambos franjiverdes fabricarían el 1-0. Un gol de bella factura, por la asistencia del catalán y la definición del andaluz. Tras un saque de banda peinado por Boyé, Pere Milla realizó una magnífica apertura larga a Fidel, quien condujo al área, recortó a Janko con la izquierda y ajustó al palo largo con la derecha. Sí, con la diestra.

El equipo ilicitano logró una ventaja que valía oro en un duelo trascendental. Para conservarla, mantuvo el guion, queriendo alejar al rival de su portería. La mejor defensa, un buen ataque. Incluso tuvo una oportunidad para aumentar la renta, a través del balón parado. Fidel buscó el doblete en un intento de gol olímpico que rozó el palo. 

El Real Valladolid se mostraba inoperante, en buena medida por el gran trabajo franjiverde. Sin embargo, también tenía algo que decir. Para fortuna del Elche, apareció Gazzaniga para salvar el remate a bocajarro de Kenan Kodro en el área pequeña. Una acción previa de Orellana, desviada con el pie, y una falta de Rubén Alcaraz fácil a las manos fue el trabajo del argentino en el primer tiempo.

Salvo la citada acción, el Elche mantenía a raya a su adversario, sin necesidad de encerrarse ni transmitir miedo a ganar. Incluso tuvo la última antes del descanso, en un contragolpe culminado por Boyé que tapó la zaga visitante.

El Elche lo fio a aguantar…y lo pagó

Tras el paso por vestuarios, los pucelanos metieron una marcha más en busca de la igualada. Ganó cuota de posesión y metros, pero los de Escribá mantenían su firmeza atrás. Retrasaron metros, confiando en su solidez en bloque bajo, con predisposición a sentenciar al contragolpe.

El partido estaba donde el Elche quería. Después de media hora, apenas habían pasado cosas en el segundo acto. Sólo una falta frontal muy alta por cada bando, con Boyé y Rubén Alcaraz como ejecutores. Y los problemas físicos de Josema, reemplazado por Mojica.

Escribá buscó más control y velocidad desde el banquillo: Víctor Rodríguez y Rigoni por Pere Milla y Tete Morente. Apenas tuvo efecto, pues el Real Valladolid achuchó más en la recta final. Y como en la primera mitad, Gazzaniga apareció, esta vez para neutralizar un peligroso chut lejano de Michel desde la frontal, con ‘tráfico’ por medio.

El Elche fio toda la conservación de los tres puntos a aguantar atrás y cazar alguna contra. Escribá puso más cemento y verticalidad: Luismi y Josan por Raúl Guti y el goleador Fidel. El plan estuvo a punto de salir bien. Pero dos minutos fatídicos, con Rigoni como protagonista, lo echaron todo a perder. 

El extremo tuvo la sentencia en un mano a mano con Masip, que salvó el tiro entre las piernas. Y en el córner posterior del Real Valladolid, peinó con la mala fortuna de que le quedó franca a la cabeza de Olaza, que sólo tuvo que orientar para marcar el 1-1 en el 85′.

El Elche intentó un último arreón en el tiempo añadido, pero sin energía ni fluidez. Sensación de mazazo por los dos puntos perdidos en un duelo directo por la salvación en casa. Incluso la última oportunidad corrió a cargo de los visitantes, con un remate de cabeza de Marcos André alto.

Ficha técnica

1 – Elche: Gazzaniga; Barragán, Gonzalo Verdú, Dani Calvo, Josema (Mojica, min 59); Tete Morente (Rigoni, min 72), Raúl Guti (Luismi, min 82), Marcone, Fidel (Josan, min 82); Pere Milla (Víctor Rodríguez, min 71) y Lucas Boyé.

1 – Real Valladolid: Masip; Janko (Luis Pérez, min 75), Bruno, Joaquín, Olaza; Orellana (Jota, min 63), Roque Mesa (Míchel, min 63), Rubén Alcaraz, Óscar Plano (Hervías, min 75); Sergi Guardiola y Kenan Kodro (Marcos André, min 63).

Goles: 1-0, Fidel (min 21); 1-1, Olaza (min 85).

Árbitro: José María Sánchez Martínez (comité murciano). Amonestó por parte del Elche a Pere Milla (min 25), Marcone (min 36), Dani Calvo (min 71), Gonzalo Verdú (min 83) y Rigoni (min 89) y por parte del Real Valladolid a Kenan Kodro (min 11), Joaquín (min 51) y Janko (min 66).

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 31 de Primera División disputado en el estadio Martínez Valero a puerta cerrada. Ambos equipos saltaron al terreno de juego con camisetas en señal de protesta contra la creación de la Superliga europea.

Foto: LaLiga

3 COMENTARIOS

  1. Vamos a descender (ojalá me equivoque), será justo, y el responsable es Bragarnik porque hizo un proyecto deportivo plagado de fallos. Ésta es la cuestión: los errores en los fichajes: Almirón, Marcone, Rigoni, Lucumí, Sánchez Miño, Koné, el mercado de invierno (y algunos otros, discutibles).
    La afición tiene que plantearse por qué, siempre que logramos alcanzar la 1ª, descendemos por la ineptitud de nuestros dirigentes: en 2015 por Sepulcre y Anguix, y en 2021 por Christian Bragarnik. Quizá tenemos los propietarios que nos merecemos, quizá nos representan y somos de 2ª. Tristeza.

  2. Como ya dice y veo que se comparte, somos un equipo de segunda, tirando por lo alto.
    Siempre cometen los mismo fallos.
    Hay que poner algo más que corazón y lágrimas, quitando a dos jugadores de este equipo los demás se podían ir a jugar a 3a.

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