Hay vida y Liga para el Elche. A la tercera fue la vencida. Y por fin los ilicitanos saborearon un triunfo agónico, sobre la bocina, igual hasta injusto. Pero tres puntos de oro ante un rival directo como el Girona que no mereció caer por la mínima. Esa es la verdad. Pero el gol de Escriche dictó sentencia y los ilicitanos recuperan terreno en el play-off.
Pacheta dio un giro de tuerca a su dibujo táctico jugando con tres centrales con la presencia de Josema y dejando la medular para Folch junto a los extremos Josan y Fidel con libertad de movimientos, además de la dupla atacante formada por Nino y Escriche.
Lo cierto es que el equipo tuvo una buena salida al campo, pero la primera ocasión de peligro la tuvo Stuani que al cuarto de hora se encontró la mejor parada de Edgar Badia. La réplica la puso en el minuto 23, Dani Calvo con un remate alto a la salida de un córner.
El partido fue un tuya mía a la hora de tener la posesión y el ritmo del partido.
A los 35 minutos, Pedro Riesgo salvó el primer gol en un tiro desde la frontal de Josán.
El Elche mostró más empaque y dio otra sensación durante la primera parte.
Borja Garcia dio el susto a Edgar Badia nada más empezar la segunda parte pero el Elche golpeó doble. Acertó en el minuto 47 con un jugadón de Josan que le puso a Escriche medio gol. Los de Pacheta abrieron la lata en una genialidad del crevillentino que bailó a cuatro defensas y su asistencia la remató de cabeza el delantero.
Y a partir de ese momento, el Girona dio el paso adelante. En el minuto 51 el colegiado anuló un gol a los visitantes por fuera ee juego. Primer aviso. En el minuto 63, Edgar Badia volvió a ser salvador en otra doble llegada de los visitantes.
Pacheta movió ficha con la entrada de Andoni Lopez y Jonathas de Jesus. Antes entró Pere Milla. El partido estaba peligroso. Stuani en el minuto 79 quemó otra oportunidad com un tiro que salió rozando el palo.
Para los últimos diez minutos, Nino y Josan dejaron el campo por Claudio Medina y Manolin. Pacheta buscaba cerrar su área. Y se atrincheró ante la avalancha de los visitantes. Gumbau envió otro balón al travesaño. La suerte estaba sonriendo a los ilicitanos. Edgar volvió a hacer gala de sus reflejos en un tiro lejano de Gumbau. El Elche resistió como nunca. Nunca antes ese sufrimiento había dando tanto premio.
Foto: DF