El Elche CF queda en manos de sus perseguidores para saber las consecuencias reales de la derrota ante el Mirandes. Nada que objetar al tropiezo. En Anduva, el Elche no tuvo pegada, estuvo gris en la zona de ataque y se salvó de un resultado peor. A falta de tres jornadas para el final de la Liga, el sueño sigue siendo posible pero sin depender de sí mismo. Ahora, toda la presión para los perseguidores: Tenerife, Alcorcón y Rayo Vallecano. Ahora tienen su oportunidad de oro.
Pacheta volvió a confiar en San Román bajo los palos e introdujo rotaciones con la presencia de Josema como lateral izquierdo, la presencia de Víctor Rodriguez haciendo dupla en la medular con Manolin, la incorporación de Pere Milla en el enganche o Fidel por la izquierda con Iván Sánchez en el banquillo.
El Elche no especuló desde el pitido inicial. Y para no cometer el mismo error que en Santander, hizo una buena salida de partido con tres acercamientos peligrosos en los primeros diez minutos.Fue un espejismo.
El Mirandés dio señales de ataque en una acción de Alvero Rey que obligó a intervenir a San Roman despejando el peligro, a los 20 minutos de juego. El juego se equilibró por momentos sin llegadas claras por ninguno de los dos equipos. Y así se llegó al descanso.
El peor escenario
La segunda parte comenzó como peor se podía esperar. En la primera llegada del Mirandes en un córner se adelantaba en el marcador. Salida dubitativa de San Román y en el segundo palo Marcos André marcó de tiro cruzado en el minuto 59.
Pacheta movió ficha con la salida al campo de Escriche, Nino y Ramón Folch sentando a Víctor y Jonathas. Tocaba hacer otra vez la machada. Nino en el minuto 60 tuvo su oportunidad pero el tiro salió alto. Y Fidel instantes después tampoco acertó.
El Elche trató de hacer más grande el campo de Anduva. Dio el paso al frente pero vio como casi todos los espacios eran bien cubiertos por los locales. Para más in ri los locales casi marcan otra vez a balón parado. Pero el centro lateral se fue al travesaño y a renglón seguido Merkelan perdona en otra contra con otro balón al palo y parando el segundo tiro San Román que enmendó su acción del gol. El Mirandés perdonó la vida al Elche.
Iván Sánchez entró en el tramo final para meter más mordiente en el ataque. Y Folch en el 76 remató fuera. Pero no hubo manera. Diego Bri el canterano volvió a jugar para los últimos compases del partido. A la desesperada. Pero sin fútbol. Una derrota inesperada pero merecida. Ahora a rezar para que los rivales no aprovechen este tropiezo.