La carta del Elche CF a los Reyes Magos no trajo el mejor regalo pero sí al menos sumar un punto sobre la bocina ante un aspirante al ascenso como es la SD Huesca. Los franjiverde caían por la mínima (0-1) ante la SD Huesca pero en el minuto 91, Pere Milla hizo justicia deportiva para dejar las tablas en el marcador, en un inesperado desenlace final.
El partido comenzó con un sentido minuto de silencio hacia la madre de Pacheta que había fallecido esta misma semana. El técnico agradeció el calor y apoyo recibido desde la grada. De la nostalgia, al tajo. Y lo cierto, es que los franjiverde demostraron que empiezan el nuevo año con las pilas puestas. Ante un Huesca que es uno de los aspirantes al ascenso, los locales dominaron casi todas las facetas de juego.
Seguridad defensiva, a pesar de un error de Gonzalo Verdú que pudo costar caro ante Cristo, manejo y control del balón con un inspirado Ramón Folch y Gonzalo Villar. Y con la presencia de Iván Sánchez se buscó romper por la derecha, pero faltó ese acierto final en las pocas llegadas generadas. Tan solo Qasmi en un taconazo a punto estuvo de sorprender a Álvaro, tras una acción en la que Juan Cruz desnudó a Miguelón, pretendido en su día por el Elche.
El Elche demostró ser el Huesca que en su casa casi nunca pierde, pero se estrelló ante la seguridad del cuadro altoaragonés que en ningún momento se fue del partido, a pesar del meneo en la posesión que le dio el cuadro ilicitano.
Y en la reanudación, el mismo guión. El Elche siguió a lo suyo. Y Nino en el minuto 50 pudo abrir el marcador. Su disparo a centro de Fidel lo detuvo el portero visitante. Pero, quien abrió la lata fue Mikel Rico, en el minuto 54, con un zapatazo que sorprendió desde fuera del área a Edgar Badía. Demasiado castigo para los locales. Lo más preocupante es que el equipo no supo rehacerse, ante un Huesca que jugó a contemporizar y alargar sus posesiones. Los oscenses demostraron su podería y el hecho de ser el equipo menos goleado de la categoría con 18 goles.
Pacheta se la jugó con Josan y Pere Milla, que entró en el minuto 70 por Nino, después de haber llegado a tiempo al partido. Ni por esas. El Elche se enredó, no pudo dominar el balón y acabó desquiciado. Juan Carlos pudo poner el 0-2 en el minuto 83, pero Edgar lo evitó. Óscar Gil pudo poner la igualada en el minuto 87 pero su centro-chut que dio en Mosquera salió desviado por poco.
Tocaba arrebato final. Y Pere Milla subió la temperatura a la gélida grada marcando el tanto del empate en el minuto 91. Un punto de fé, de equipo y de creencia en conseguir el objetivo de estar entre los mejores al final de la Liga.
Foto: Liga SmartBank